Hace 30 años, siendo un joven estudiante de antropología social en la Universidad de Toronto, el Maestro Paul C. Kersey escogió a la comunidad de Comachuén (municipio de Nahuatzen, Michoacán, México) del Pueblo P’urhépecha como sitio de su trabajo de campo para su tesis de doctorado. La vida da vueltas, y este propósito quedó incumplido, pero no así el registro de su estancia allí. Ahora, gracias a la iniciativa y entusiasmo de dos comachuenses, Pablo Sebastián Felipe y José Roberto González Moralez y de Lachlan William Asher, que supieron de la existencia de dicho archivo se ha organizado una exposición con 85 imágenes amplificadas y más de 800 fotografías proyectadas: “Comachuén hace 30 años: Una retrospectiva fotográfica del archivo personal de Paul C. Kersey Johnson”.

La colección muestra cómo era el pueblo de Comachuén hace 30 años: su gente, sus calles, la arquitectura, el trabajo, las fiestas, la indumentaria, escenas cotidianas… incluso actividades que han desaparecido con el tiempo.

Los invitamos a disfrutar de esta mirada al pasado de un pueblo de la Meseta P’urhépecha.

La Comunidad indígena de Santa María Comachuén se localiza en las montañas del eje neo volcánico occidental, llamado Meseta Purépecha del Estado de Michoacán. Su asentamiento data del período precortesiano y se le llamó Kumánchen, vocablo P’urhépecha que significa “lugar sombrío o lugar de sombra”.

Su primera congregación fue entre los años 1528 y 1539. Mientras que la segunda se realizó el 30 de enero de 1604. Quedó sujeto a la cabecera civil y religiosa de Sevina y tributó al encomendero Juan Infante. El pueblo-hospital de Santa María Comachuén contó con la cofradía de la Concepción, con un mueble de quince reses, sujeto a pueblo que elegía alcalde, regidor y alguacil mayor.

De acuerdo al censo de población de 2010, lo habitan 4, 762 almas, de las cuales 2, 321 varones y 2, 441 mujeres. Su actividad económica está basada principalmente en la producción agrícola de autoconsumo, así como en la explotación de la madera. Tradicionalmente la comunidad se especializó en la elaboración de canoas, bateas, máscaras, palos para escoba, fustes, y posteriormente a la elaboración de barrotes torneados y muebles. Las mujeres se especializaron en los trabajos artesanales de bordado a mano. Asimismo, la comunidad posee reconocidos en el ámbito del canto y la música. A finales del siglo XX debido a la falta de trabajo y a la sobreexplotación de la madera la migración ha sido una de las alternativas de subsistencia para las familias.