Historia de la comunidad de Caltzontzin (San Salvador Kumbutzio)


El antiguo San Salvador(Caltzontzin)


La fundación de la Comunidad de San Salvador Combutzio data de épocas Prehispánicas, y no precisamente con este nombre, sino solamente Kombutzio (lugar de pequeños cerros en forma de bolas) la habitaban hombres y mujeres llamados Kutsua arhakuti (oreja rajada), que se dedicaban a la siembra, caza y recolección. Vivían en los cerros cercanos ahora al Volcán Parikutin, teniendo que establecerse en las llanuras pues era el lugar idóneo para la siembra y la domesticación de los animales, así como para la construcción de sus viviendas.

Se dice que las personas que habitaron esta comunidad eran muy capaces e inteligentes por la perfección en el trazado y construcción.

Fue así como el pueblo poco a poco fue creciendo y formando una comunidad además de convivir con otros pueblos o grupos que fueron estableciéndose alrededor de ellos. Crearon sus propios rituales y danzas en honor a la naturaleza, para tener buenas cosechas, para que no faltara la lluvia, también crearon sus propios dioses; de la noche, del día, de la tierra, del fuego, del viento, del agua, de la muerte, de la vida, etc.

En esta antigua comunidad el trabajo dependía de la siembra, en ese tiempo se araba y se barbechaba con arado de madera o las coas, (una especie de bastón con punta) las cosechas solían ser muy buenas la mayoría eran para consumo propio o las intercambiaban por otoros productos.

Otro de los trabajos importantes era la elaboración de tejamanil de pinabete que se llevaba a vender a la ciudad de los Reyes se vendía por erepitas (medida que se componía de 400 tejamaniles).

Tenían sus propios juegos y deportes tales como el Huarukua que se jugaba con unos bastones de madera y con una pelota elaborada de un material que producían los gusanos el cuál era muy resistente, como la lona. El trompo de madera era otro de los deportes, el kuiliche, era un juego muy tradicional se puede decir que es el antecesor del domino.

La alimentación consistía en una gran variedad de hongos tales como: el llarin terekua, kuin antziri (pata de pájaro), charamitzi (trompa de puerco), pashacua (clavillo), kunio terekua (panza de buey) y en hierbas comestibles como: el xakua, quelite mortaza, tzicuer shakua (hierva mora), aro xakua y el pari xakua.

También se alimentaban de panales de avispas tan grandes que llegaban a medir 80 cm, existía un panal que en su interior se encontraban gusanos comestibles. La carne no podía faltar sobre todo la de venado, conejo, ardilla, armadillo y gallinas silvestres. Todo esto con el maíz que era su fuente principal de alimentación.

Sus danzas tradicionales eran en honor a divinidades, las primera en honor a la Naturaleza, ya después fueron en honor a las divinidades de los conquistadores, resultando una mezcla de ambas costumbres, los Chichimecas danzaban con su flecha y su arco, comenzaban en San Salvador y terminaban en una semana en San Juan de las colchas. Los Tecomanes bailaban al ritmo de una flauta y un tambor. Los Chilin Chilies (Chin chilis) danzaban por el mes de diciembre, para dar gracias a la naturaleza por las cosechas, así como a los 4 elementos, (tierra, fuego, aire, agua) esta danza constaba precisamente de cuatro integrantes que representaban las cuatro estaciones del año.

Los Kurpitiechas o kurpites (los que se van juntando) danzaban con mascaras de animales y tapa rabos, sonajas en los pies y pieles curtidas, mucho después se modificaría su forma de vestir y danzar. La danza de los Negros se bailaba despues de la de los Kurpitiechas, igualmente al principio con atuendo de animales. La danza de los Moros, bailada entre mayo y junio en honor a la santísima Trinidad, otra danza era llamada la doctrina bailada en el carnaval. Y más recientemente la danza de los soldados que se bailaba o baila en la fiesta en honor al Divino Salvador.

Con la llegada de los españoles, todo sufrió un cambio, las danzas, los juegos y los deportes se modificaron, algunos de los dioses desaparecieron, incluso se le cambio el nombre a San Salvador Combutzio, en honor al Divino Salvador tuvieron entonces que adaptarse a una nueva religión y a una nueva forma de vida. Pero la comunidad siguió su rumbo, los frailes mejoraron algunos de los oficios existentes y enseñaron otros. Se dio un gran impulso a la comunidad, a la convivencia, al trabajo, a la educación, a la cultura y a la salud.

Fue hasta año de 1942 cuando se daba el primer aviso de lo que vendría después, todo comenzó con un fuerte temblor que se dio como a las 13:00 , donde se derrumban rocas enormes del cerro de Tancítaro, arrastrando todo tipo de árboles, desde aquel día constantemente se sentían temblores de todas magnitudes, algunas personas ya tenían la idea de que eso era el nacimiento de un volcán pero la mayoría de ellas lo ignoraban.

Años atrás había llegado un geólogo y su grupo que tenían como misión observar todo el terreno, reunió a 15 hombres y se interno en los bosques y montañas, haciendo sus observaciones. Un día el geólogo les comunico a las poblaciones cercanas que próximamente nacería un volcán por esos rumbos pero no le creyeron y se mofaron de él.

Fue hasta el año de 1943 un sábado 20 de febrero a eso de las 15:00, cuando el nacimiento y erupción de un volcán hizo que todo un pueblo quedará estremecido, por que ante sus miradas estaba un gigante de fuego que hacía ver cercano el fin del mundo, según lo mencionaban ellos.

El volcán se localizaba del pueblo como a 1,5 km en un lugar llamado Kuiyutziro, un sumidero que con anterioridad lo intentaban llenar con tierra, ramas y basura que se generaba de la siembra y actividades agrícolas, lo cuál nunca sucedió.

La mayoría de la gente aterrorizada huyó como pudo, las pocas personas que quedaban llevaban consigo las imágenes religiosas de la capilla, éstos se reunieron en una zona llamada Tinajuata. De ahí partieron unos cuantos a la comunidad de Zacan, otros a la comunidad de Angahuan, unos a la comunidad de Charapan, de San Juan, Santa Clara y Zirosto.

A los tres días de la erupción del volcán llegaron cantidades impresionantes de turistas de todo el mundo, los japoneses, alemanes, franceses, rusos y sobre todo norteamericanos. Con la llegada de los turistas se hizo un gran comercio en la zona, donde podía adquirirse gran variedad de artículos de la región, desde un buen café hasta piedras volcánicas.


La fundación de una nueva comunidad


Con la erupción del volcán llamado Paricutin (del otro lado) llegaron las consecuencias, el volcán estaba causando destrozos la arena alcanzaba 1.30 metros de altura la lava seguía avanzando y con ello las tierras de cultivo, los bosques, y los manantiales quedaban sepultados.

Fue entonces que el gobierno americano envío un representante al gobierno mexicano, donde les informaba que si no resolvían la problemática causada por el volcán, él solicitaría un permiso para llevarse consigo a los habitantes de esa región que no tuvieran donde refugiarse, fue entonces cuando el gobierno de México comenzó a actuar. Dando a escoger varios lugares como, Ario de Rosales, Zirosto oZacan, donde los afectados podrían asentarse, entre ellos también estaba la Hacienda de don Julio Murguillo o de “Caltzontzin” (nombre genérico de los reyes de Michoacán, el segundo en importancia en el antiguo México después de Moctezuma) al mando del gobierno Félix Ireta y el General Lázaro Cárdenas el cual hizo la compra del terreno en 200 mil pesos.

Se formó una comisión del pueblo de San Salvador para verificar el terreno que les ofrecía el gobierno, encabezada por el entonces representante don Domingo Rangel, dieron el visto bueno y así comenzó la formación de una nueva comunidad, con la ayuda del ejército se fueron trasladando hasta aquel lugar llegando el 10 de junio de 1943.

El gobierno para entonces ya había trazado con la ayuda de ingenieros la división de los terrenos a sí como las calles y lugares importantes. Las primeras casas fueron elaboradas por el gobierno y se rifaron entre los afectados tocándoles a otros nada más el terreno.

Como la educación era lo primordial la escuela fue construida por 3 pelotones del 15° regimiento durando su construcción 2 años, en la cual se plasmó un mural o pintura de la “Historia del Volcán”. La ayuda internacional no se hacía esperar y llegaban alimentos, ropa, ganado y medicamentos.

La salud de los afectados estaba al mando del doctor Viniegra y el Doctor Camacho, los cuales instalaron un campamento en este lugar. Con los destrozos que había dejado el volcán en el antiguo San Salvador todo estaba sepultado, así que el gobierno mexicano comenzó a abrir empleos en la nueva comunidad, los trabajos consistían en telares, pequeñas fabricas de calzado, carpinterías y artesanías. Viendo la situación tan desesperante que se vivía en el nuevo poblado y la situación que obligaba al gobierno americano (la 2° Guerra Mundial) a contratar mano de obra, algunos decidieron ir a trabajar en los campos y fabricas norteamericanas.

La construcción del templo y la unidad de salud así como de la jefatura de tenencia se inició 6 años después del arribo de las primeras personas.

Muchas personas lograron sostenerse con la venta de flores que se daban en el campo tales como el mirasol y el árnica que eran muy bien cotizadas en la ciudad de Uruapan, también comerciaban la leña, el carbón y la madera. Algunas personas regresaron al antiguo pueblo a trabajar el tejamanil y la siembra.