Así es como se debe de tocar y cantar la pirékua tradicional, con los amigos para la mujer amada en al esquina de un bello Pueblo empedrado y/o al lado de una Parhángua (fogón) en complicidad con Tatá Kurhíkua (padre fuego). El pirékua todo el tiempo es improvisado, tal y como lo muestran en este vídeo Carlos Mota (Uiríati) quien toca la guitarra y su hermano Eduardo Mota (Tsintsüni) que canta con mucho sentimiento, ellos viven en Maple Valley, estado de Washington, USA y son originarios de Tzintzuntzan, Michoacán.

Es pues la nueva generación de piréricha, cantantes de los Pirékuas.